Cómo prepararte para correr tus primeros 10K y 21K
Dar el salto desde los primeros trotes hasta completar una carrera de 10K —o incluso un medio maratón— es un proceso que transforma tu cuerpo y tu mente. Si estás recién comenzando, es normal sentir dudas o pensar que aún te falta, pero la verdad es simple: todos los corredores empezaron igual que tú, con ganas, paciencia y un plan claro.

Empieza lento, pero empieza bien
Lo más importante al inicio es no apurarte. Tu cuerpo necesita adaptarse al impacto del running. Durante las primeras semanas, combina trote suave con caminata:
2 min trotando + 2 min caminando × 20–30 min,
3 veces por semana.
Cuando ya puedas correr 30 minutos seguidos sin quedarte sin aire, estarás listo para aumentar distancia y exigencia.
Cómo estructurar tu preparación para los 10K
Una vez que tengas una base sólida, organiza tu semana así:
- 1 día de trote suave: 30–45 minutos.
- 1 día progresivo: empiezas lento y terminas más rápido.
- 1 día de tirada larga: parte con 5–7 km y sube 1 km por semana.
Con 6 a 8 semanas constantes, llegar a los 10K es totalmente alcanzable.
Dar el salto a 21K
El medio maratón requiere más paciencia, pero no es imposible. Dedica entre 10 y 14 semanas a la preparación. Los pilares:
- Tirada larga semanal, desde 7–8 km hasta 16–18 km.
- Entrenamientos de ritmo, para sostener velocidades constantes.
- Recuperación activa, como caminatas o trotes suaves.
- 1 día de descanso total por semana.
Si recién empiezas, lo ideal es correr primero un 10K y luego avanzar a los 21K.
La importancia de las zapatillas correctas
Tus zapatillas son tu herramienta principal. Fíjate en:
- Buena amortiguación, especialmente como principiante.
- Tipo de pisada (pronador, neutro o supinador).
- Estabilidad y drop medio (8–10 mm).
- Comodidad inmediata: si molesta desde el inicio, descártala.
Evita zapatillas que no son específicas para running; aumentan el riesgo de lesiones.



Indumentaria adecuada
Para una experiencia cómoda:
- Poleras técnicas que absorban el sudor.
- Calzas o shorts ligeros que no rocen.
- Calcetines deportivos sin costuras.
- Capa liviana para el frío y gorro/lentes para el sol.
No necesitas un gran closet deportivo: solo prendas funcionales y cómodas.
Recuperación: el secreto para mejorar sin lesionarte
La recuperación define tu progreso:
- Estiramientos suaves 5–7 minutos después de correr.
- Movilidad para tobillos, caderas y gemelos 2–3 veces por semana.
- Uso ocasional de foam roller o masajes.
- Dormir 7–8 horas para reparar tejidos.
Incluye 1–2 días de descanso a la semana. Tu cuerpo lo necesita para adaptarse y mejorar.
Hidratación y alimentación para correr mejor
Hidratación
- Bebe agua durante todo el día.
- Para trotes de más de 60–70 min, lleva hidratación o usa isotónicas.
- En calor, hidrátate desde la mañana.
Alimentación
- Antes de correr: alimentos livianos (avena, fruta, yogurt, tostada).
- Después: mezcla carbohidratos + proteínas para recuperar.
- Evita comidas pesadas antes del entrenamiento.
Tu aventura runner comienza con el equipo correcto
Correr 10K o 21K es un viaje personal lleno de descubrimientos. La constancia te llevará lejos, pero contar con el equipamiento adecuado hará el camino más cómodo y seguro.
Y si estás listo para dar el primer paso, en Easton encontrarás las mejores marcas deportivas y los mejores precios para comenzar tu aventura runner.
¡Elige bien, entrena con ganas y disfruta cada kilómetro del camino!